Thursday, June 23, 2011

Día 14

Viernes 30 de Julio del 2010

El día ha amanecido nuboso pero aún así el poco sol que había pegaba fuerte. Nos hemos desperezado muy lentamente y mientras desayunábamos en la terraza hemos ido planeando nuestra mañana. Cristina, la chica del hostal nos ha dicho que que no nos iba a dar tiempo a pasar a las islitas de Hvar, y se le ha ocurrido que podríamos ir a dar una vuelta por el pueblo.
Nos ha parecido que estaba todo demasiado masificado, había muchísimo turista...El paseo estaba repleto de hoteles y restaurantes, playas privadas, piscinas con cascadas.

Al final hemos optado por un rinconcito más alejado de todo ese barullo y hemos tomado el sol mientras comíamos los bocatas. Inés incluso se ha echado una siesta echa una bola encima de una roca. No tenemos ni idea de como ha conseguido dormirse en un sitio tan incómodo.


 El trayecto en barco hasta Korcûla ha sido de una hora y pico. Al llegar nos hemos dado un paseito helado en mano y después hemos subido a  nuestro nuevo hostal, cuya recepción es una barra de bar y tiene luces rojas. Cualquier otro pensaría otra cosa. 
Sin embargo las habitaciones están muy bien y los baños impolutos. 

Por la tarde hemos ido a visitar el pueblecito, nada del otro mundo. Además hemos salido un poco tarde y se estaba haciendo de noche. De repente nos hemos topado con unas camas elásticas. No hemos podido evitarlo, allí que hemos ido a quitarles el sitio a los niños. Ha sido muy divertido volver a los 7 años jajaj

Hoy tocaba salir de fiesta, pero solo hemos durado hasta las 4. Aún así nos hemos echado unas risas con unos chicos de Nueva Zelanda. No hemos entrado a las discotecas porque eran muy caras y los bares cierran a las 2. 
Sobre las 4 de la mañana han empezado a caer rayos a tutiplen, queríamos volver al hostal pero teníamos muchísimo hambre así que nos hemos puesto a buscar alguna tienda abierta... y nos hemos topado con una panadería. Un chico ha ido a por una barra de pan para darnos. En cuanto se ha dado la vuelta Irene ha entrado a la panadería y ha empezado a tirarnos pasteles de carne. Han volado empanadillas y panes. Lorea cogiendolas al vuelo y yo tirada en el suelo partiéndome en dos de la risa. Ha sido un gran momento jajaja

Nos ha sabido a gloria. Me he quedado tan a gusto que me he dormido al segundo. Al día siguiente todas me dijeron que ronco. Será que estaba feliz durmiendo con la tripa llena de algo que no era embutido!


No comments:

Post a Comment